El cotizado actor español habría encontrado de nuevo el amor en brazos de esta atractiva modelo sevillana que fuera ganadora de Miss España en 2014.

Los amores, como las bicicletas, son para el verano, y parece que coincidiendo con los meses de calor, Mario Casas vuelve a estar enamorado. El año pasado por estas fechas paseaba feliz sobre una moto de agua por las Islas Baleares con su entonces pareja, la actriz belga Déborah François, a la que conoció rodando la película 'El practicante', pero con la que rompía hace pocos meses.

 Sin embargo, ese hueco en el corazón del intérprete lo habría ocupado otra joven: Desiré Cordero. Así lo asegura en su portada la revista 'Semana', que les califica de "inseparables" y publica como prueba del romance fotos de la joven sevillana visitando el domicilio del reciente ganador de un Goya. Las fotos confirmarían que se trata del romance sorpresa del verano –aunque Ben Affleck y Jennifer Lopez pueden decir también algo al respecto– y demuestran que su actual pareja "ya forma parte de su día a día".

Desiré Cordero, esta modelo de 29 años saltó a la fama cuando se proclamó reina de la belleza patria en el certamen de Miss España de 2014. Más tarde participaría en Miss Universo, donde sorprendió durante el desfile con traje regional, vestida con un diseño inspirado en la reina Isabel la Católica. "Cuando nombraron al top cinco, lo único que quería es irme detrás de los escenarios. Me puse a llorar. Vinieron muchísimas niñas a mí para decirme que yo era su ganadora. Me quedé muy desengañada. Pero lo disfruté muchísimo y creo que lo he dado todo para poner a España en el lugar que se merece", dijo entonces a 'El mundo' tras tener que conformarse con quedar entre las diez finalistas.

Por entonces Desiré soñaba con ser un ángel de Victoria's Secret y mantenía una relación sentimental con el futbolista Álvaro Ruiz, hijo del que fuera defensa del Real Madrid, Fernando Hierro. Juntos planeaban disfrutar el sueño americano y hacer carrera en Nueva York, pero cortaron al año siguiente.

 "Dentro de diez años espero ser una top internacional, haciendo muchas portadas. Ojalá llegar a ser como Gisele Bündchen, que es mi modelo favorita. También me veo con pareja y con niños; quiero ser madre joven. Intentaré por todos los medios que eso no rompa mi carrera", confesaba en una entrevista a Vanitatis en 2016.

Con aparente predilección por los jugadores de balompié, a Desiré se la relacionó más adelante con Cristiano Ronaldo, después de que el delantero luso rompiera con Irina Shayk, y más tarde tuvo un romance con Joaquín Correa, actual jugador de la Lazio y al que conoció durante su paso por el Sevilla, pero del que ha borrado el rastro en su Instagram.

A Mario Casas por su parte se le han conocido también varios romances, todos ellos con compañeras de profesión. Se le ha relacionado por ejemplo con Amaia Salamanca y con Clara Lago, a la que conoció rodando 'Los hombres de paco'. Pero fue su romance con María Valverde, su coprotagonista en 'A tres metros sobre el cielo', el que más dolió a los fans cuando llegó a su final.

 Después vendrían Berta Vázquez, con la que saltó la chispa mientras trabajaban en 'Palmeras en la nieve' y Blanca Suárez. Amigos desde hace años, trabajar de nuevo juntos en 'El bar' fue clave para que dieran un paso más y comenzaran una historia de amor que se rompía en 2019.

De momento ni Mario ni Desiré han dado pistas en sus redes sociales que confirmen o desmientan su relación. El actor de hecho se muestra poco activo en redes últimamente, pero estaremos muy atentos al desarrollo de los acontecimientos en uno u otro sentido.

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