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Olga Alava - Miss Earth 2011 en Beijing

La ecuatoriana Olga Álava es una bella ecuatoriana con los pies bien puestos sobre la tierra. Tanto así que a la inapreciable ventura de sus 23 años, y a sus múltiples atractivos físicos, acaba de sumar el título mundial de Miss Earth (Señorita Tierra) de 2011. Y este título lo dice todo. Porque se trata de un concurso en el cual, reiteran sus organizadores, se persigue premiar a la “belleza con causa”. Más allá de tafetanes, lentejuelas y la persecución implacable de los paparazzi, hay un contingente de beldades que harán todo a su alcance por dar un poco de alivio a nuestro maltratado planeta. La premiada sabe que, junto a las bondades y fama que depara el palmarés, estarán adquiriendo un serio compromiso con la Madre Tierra.

“Para mí, este título, que por primera vez recae en el Ecuador, será una gran herramienta con la cual promoveré por el mundo no sólo la gran biodiversidad de mi país, sino también su cultura,” afirma a Pueblo en Línea Olga Mercedes Álava Vargas, nacida en la ciudad de Guayaquil, en 1988, poseedora de una licenciatura en Negocios Internacionales y hablante de español, inglés y mandarín, idioma este último que estudió en la ciudad de Shanghai, por un año.

Durante su paso por Beijing, la Miss Earth ecuatoriana, hizo una pausa para encontrarse con sus compatriotas y la prensa en China, en la residencia del embajador ecuatoriano en Beijing, para una temprana velada Navideña entre villancicos y rezos de Novena.

“Me interesa muy en especial, continúa en su diálogo con nuestro portal, difundir entre la juventud y la niñez la importancia del cuidado de la Naturaleza.

Y eso nos consta, pues desde el mismo momento en que se sumó al concurso, el cual ganó en Manila, Filipinas, el pasado 3 de diciembre, tras imponerse a otras 84 candidatas de todos los países, esgrimió como una baza a su favor la defensa del proyecto de Yasuní, ese inmenso pulmón verde que pugna por respirar tranquilo en su país.

“Con este premio, indica, siento que tengo más poder en mis manos para ayudar en proyectos como el de Yasuní”, explica.

Como experta en temas empresariales, además, a la Señorita Tierra de 2011 no le resultan ajenas las potencialidades que en esa área le ofrece China: De ahí que ya esté adquiriendo materias primas y maquinarias para el negocio de su familia en Ecuador.

Gracias a su capacidad empresarial y a su talante emprendedor y comprometido con las mejores causas del planeta, Olga Álava demuestra que la exaltación de la belleza femenina no tiene por qué ser sinónimo de frivolidad, ni sujeción sexista. Con paso delicado, pero pisando en firme, recorre el planeta, haciendo de su esbelta figura una bandera contra la desidia y a favor de un mejor mañana.

https://www.voy.com/206289/

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