MARIANA PAJON MI VERDADERA REINA COLOMBIANA

[bacano64]

ELLA SI ES UNA VERDADERA REINA CON SOLO 21 AÑITOS LOGRÓ SU PRIMERA MEDALLA DE ORO EN LOS PANAMERICANOS

La colombiana le dio un nuevo metal dorado al país en los Juegos Panamericanos de Guadalajara.

La bicicrosista se impuso con tranquilidad en la prueba de las damas.

Pajón logró el primer oro de su carrera en estas justas en la pista de 400 metros a las afueras de Guadalajara, metal que le da la posibilidad a la delegación tricolor de llegar a ocho oros, seis platas y siete bronces.

A la colombiana solo le falta la medalla olímpica.

Hablar de la bicicrosista colombiana Mariana Pajón es hablar de títulos, medallas, trofeos, pero hay uno que le falta, quizás el más importante: la presea olímpica.

Es tanta la obsesión de cumplir ese sueño, que el grupo que la rodea, y ella misma, lleva cuatro años preparando el asalto para Londres-2012.

La medalla de oro en los Juegos Panamericanos es el último escaño que tiene la corredora colombiana con miras a la Olimpiada. De hoy en adelante hará una preparación exclusiva para ese evento, dejando atrás que es la actual número 4 del escalafón mundial, que ha ganado 13 títulos mundiales, nueve latinos, dos del torneo nacional de Estados Unidos y que ha ganado medallas de oro en eventos del ciclo olímpico como los Juegos Bolivarianos, Suramericanos, Centroamericanos y del Caribe.

El que se colgó este viernes Pajón es el primero en unos Juegos Panamericanos, pues hace cuatro años en Río de Janeiro no compitió porque no tenía la edad reglamentaria.

Mariana Pajón nació el 10 de octubre de 1991 en Medellín, tiene 21 años y viene de una familia deportiva.

Su papá, Carlos Mario, y su mamá, Claudia, y su hermano, Miguel, siempre han sido apoyo incondicional. Su entrenador, Germán Medina, también tiene su cuota, pues se ha encargado de cuidarla y tallarla como a un diamante.

Pajón tuvo un aliciente más en Guadalajara, su mamá, la acompañó durante su estadía en México y fue una espectadora más en la pista de bicicrós de 400 metros de extensión ubicada en la zona del bosque de la Primavera, a las afueras de Guadalajara.

La felicidad de Mariana, de su mamá y de todo el equipo colombiano este viernes cuando ella bajó del podio con el oro en el pecho es indescriptible, fue como un preámbulo de lo que puede vivir el año que viene en Londres.

Lisandro Rengifo

Enviado especial de EL TIEMPO a Guadalajara